DUDAS FRECUENTES

“Cuyo”: entre el poseedor y lo poseído

 Cuyo, cuya, cuyos y cuyas son adjetivos posesivos relativos. Su función es relacionar un poseedor (sustantivo que va primero en la oración) con lo poseído, sustantivo que sigue a continuación. Con este último, estos adjetivos deben concordar en género y número.

 

Veamos algunos ejemplos:

El hombre, cuya identidad aún no se conoce, declaró ante el juez.

La poesía, cuyo autor es desconocido, se transmite de generación en generación.

La residencia, cuyas habitaciones son espaciosas, data del siglo XIX.

La mujer cuyos hijos recibieron un premio lloraba de emoción.

Vemos cómo hombre, poesía, residencia, mujer son sustantivos que actúan como poseedores;  mientras que identidad, autor, habitaciones  e hijos  representan lo poseído y concuerdan en género y número con cuyo/a, cuyos/as.

 

Sería incorrecto:

*El hombre, que su identidad aún no se conoce, declaró ante el juez.

*La poesía, que su autor es desconocido, se transmite de generación en generación.

*La residencia, que sus habitaciones son espaciosas, data del siglo XIX.

*La mujer que sus hijos recibieron un premio lloraba de emoción.

 

También pueden combinarse con preposiciones:

El delincuente, en cuyo equipaje se encontraron estupefacientes, fue detenido.

Me apasiona París, por cuyas calles he caminado en mi juventud.

Aquella casa, a través de cuyas ventanas veía el atardecer, permanece intacta en mi recuerdo.

 

Sin embargo, a veces leemos construcciones erróneas como las del siguiente título de un artículo en la web:

Más de cuarenta cosas que no le conocías su propósito

¿Cómo corregiríamos esta oración? En este caso, cosas sería el poseedor y propósito lo poseído por estas cuarenta cosas mencionadas. Por eso, no corresponde que sino cuyo. Este último tiene que concordar con el género y número de lo poseído, propósito (masculino singular). Por eso, la oración correcta sería la siguiente:

Más de cuarenta cosas cuyo propósito no conocías

 

Recordemos

Cuyo, cuya, cuyos y cuyas son adjetivos posesivos relativos cuya función es vincular un poseedor (sustantivo que va primero en la oración) con lo poseído, sustantivo que sigue a continuación. La concordancia, como dijimos, se establece con el segundo sustantivo.